July 11, 2009
11 de summertime 2009
Querido diario:
Uy, uy, uy, uy... ahora parece que lo llevo mejor, pero he tenido que comer de pie. No entiendo por qué hacen los sillines de las bicicletas tan incómodos, tan duros, con lo poco que costaría ponerles unas almohadillas amortiguadoras de fábrica. Y eso que la etapa de hoy ha sido corta, con mucho parón y ningún puerto que subir, que llega a tocar la cronoescalada y me tienen que recoger los camilleros nada más cruzar la meta. No recordaba yo que la cosa fuera tan grave, claro que en 10 años a lo mejor es que el material del que están hechos los sillines se caduca y pierde elasticidad, pero vaya suplicio para los pompis, por favor. Sólo faltará que mañana tenga agujetas y que no pueda estar ni de pie, que ya veréis qué bonito.
El entorno de la Expo, que es por donde se ha desarrollado el recorrido, interesante; el parque, perfecto para hacer el dominguero tanto con la bicicleta como corriendo, el Ebro a la derecha, o a la izquierda según el punto de vista y la orientación de cada uno, sus canales con el agua, hasta patos he visto. Y el campo de golf, qué refinamiento, venga a darle a la bola ya a las 9:00h de la mañana... Y la Expo, ¿queda algo?, os preguntaréis. Quedan los cuatro pilares que aguantaban los pabellones y los techos, nada más. Y enruna y escombros y grúas y manitous. Qué desolador comparado con hace un año.
En fin, mañana más.
Personal, Diario, Ciclismo
Posted @ 23:44 by Uy, uy, uy, uy... ahora parece que lo llevo mejor, pero he tenido que comer de pie. No entiendo por qué hacen los sillines de las bicicletas tan incómodos, tan duros, con lo poco que costaría ponerles unas almohadillas amortiguadoras de fábrica. Y eso que la etapa de hoy ha sido corta, con mucho parón y ningún puerto que subir, que llega a tocar la cronoescalada y me tienen que recoger los camilleros nada más cruzar la meta. No recordaba yo que la cosa fuera tan grave, claro que en 10 años a lo mejor es que el material del que están hechos los sillines se caduca y pierde elasticidad, pero vaya suplicio para los pompis, por favor. Sólo faltará que mañana tenga agujetas y que no pueda estar ni de pie, que ya veréis qué bonito.
El entorno de la Expo, que es por donde se ha desarrollado el recorrido, interesante; el parque, perfecto para hacer el dominguero tanto con la bicicleta como corriendo, el Ebro a la derecha, o a la izquierda según el punto de vista y la orientación de cada uno, sus canales con el agua, hasta patos he visto. Y el campo de golf, qué refinamiento, venga a darle a la bola ya a las 9:00h de la mañana... Y la Expo, ¿queda algo?, os preguntaréis. Quedan los cuatro pilares que aguantaban los pabellones y los techos, nada más. Y enruna y escombros y grúas y manitous. Qué desolador comparado con hace un año.
En fin, mañana más.
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Quizá haya algún tesoro / muy dentro de mi entraña. / ¡Quién sabe si yo tengo / diamante en mi montaña / o tan sólo un pequeño pedazo de carbón! / Los árboles del bosque de mi isla / sois vosotros, mis versos.
Salen los niños alegres / de la escuela, / poniendo en el aire tibio / de abril canciones tiernas. / ¡Qué alegría tiene el hondo / silencio de la calleja! / Un silencio hecho pedazos / por risas de plata nueva.
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