November 16, 2005
Alemania nos espera
Al final empate a uno. Aunque no tengo imagenes para demostrarlo, Antena3 no se dignó a retransmitirlo, ese mismo fue el resultado del partido jugado el lunes entre Eslovaquia y España, aquí mismo, gracias al famoso y ya mencionado PES5. A veces también acierto. Yo era España, para que hubiera un cierto equilibrio entre escuadras, y aunque Reyes consiguió un tanto de bella factura, al final la máquina eslovaca (máquina porque los controlaba la computadora, no por otra cosa) lograron el empate. ¿Quién marcó? Buena pregunta si me acordara de la respuesta. De modo que este resultado, sumado en el cómputo global de la eliminatoria al producido hace una semana, hace que España, esa España que se desgaja en mil pedazos, se clasifique también para el Mundial de Alemania, convirtiéndose así en una de las mejores selecciones del mundo, aspirante a todo, candidata al triunfo, y seguramente, en cuanto se nos cruce por delante un grupo más o menos organizado de tíos que corren detrás de un balón, y que no hayan jugado 86 partidos en la temporada, que nuestros hombres llegan agotados a la cita mundialista, no nos olvidemos, pues para casa, a descansar, que con lo que corren, luchan y se esfuerzan estos ases del balompié se tienen merecido un buen descanso. Así que como mucho a ver si aguantan cuatro partidos, y luego a la playa, no se nos vayan a herniar, que tampoco sería de extrañar.
Posted @ 23:41 by |
Permalink |
Quizá haya algún tesoro / muy dentro de mi entraña. / ¡Quién sabe si yo tengo / diamante en mi montaña / o tan sólo un pequeño pedazo de carbón! / Los árboles del bosque de mi isla / sois vosotros, mis versos.
Salen los niños alegres / de la escuela, / poniendo en el aire tibio / de abril canciones tiernas. / ¡Qué alegría tiene el hondo / silencio de la calleja! / Un silencio hecho pedazos / por risas de plata nueva.