September 06, 2007
Lluvias de verano
Después de acabar con Baudolino, buscaba esta mañana un libro que me ayudara a pasar cinco horas de la manera más amena posible. Uno no muy largo, que se leyera en ese rato, un poco más o algo menos.
El elegido ha sido Lluvias de verano, de Carlos Puerto. Craso error.
No recuerdo cuándo ni dónde, pero a los diez minutos todo me sonaba, Valeria, Cloe, Edimburgo... Ya me lo había leído.
Menos mal que la historia tiene ritmo.
Valeria es una adolescente cuyos padres la mandan un verano a Escocia para mejorar su inglés. En principio la idea no le hace ninguna gracia, pero una vez allí la cosa cambia. A punto de cumplir los dieciocho, descubre la música, la escritura, el amor y la magia, y resuelve un misterio. Misterio que junto al resto de experiencias vividas en esos dos meses, hacen que se entienda a sí misma un poco mejor, y que vea la vida de otra manera.
libros, LIJ
Posted @ 14:58 by El elegido ha sido Lluvias de verano, de Carlos Puerto. Craso error.
No recuerdo cuándo ni dónde, pero a los diez minutos todo me sonaba, Valeria, Cloe, Edimburgo... Ya me lo había leído.
Menos mal que la historia tiene ritmo.
Valeria es una adolescente cuyos padres la mandan un verano a Escocia para mejorar su inglés. En principio la idea no le hace ninguna gracia, pero una vez allí la cosa cambia. A punto de cumplir los dieciocho, descubre la música, la escritura, el amor y la magia, y resuelve un misterio. Misterio que junto al resto de experiencias vividas en esos dos meses, hacen que se entienda a sí misma un poco mejor, y que vea la vida de otra manera.
Tal vez por eso me gusta tanto la fotografía: lo que se queda plasmado en el papel es para siempre. Una puesta de sol, un valle verde, la mirada de un niño.
A pesar de que era un buen chico, Pablo era un chico. Y los chicos, ya se sabe, son unas chicas muy raras.
libros, LIJ
|
Permalink |
Quizá haya algún tesoro / muy dentro de mi entraña. / ¡Quién sabe si yo tengo / diamante en mi montaña / o tan sólo un pequeño pedazo de carbón! / Los árboles del bosque de mi isla / sois vosotros, mis versos.
Salen los niños alegres / de la escuela, / poniendo en el aire tibio / de abril canciones tiernas. / ¡Qué alegría tiene el hondo / silencio de la calleja! / Un silencio hecho pedazos / por risas de plata nueva.
.png)
